Amiga, ¿por qué no nos llega la data?

Newsletter #2

may 27, 2024

Hola amigas,

Somos 900+ amigas. ¡En una semana! KEEEEEEE

Voy a ir de a poco contestando sus mensajes, ténganme paciencia porque son un montón de mensajes y un montón de amigas. Desbordada del amor. En serio. 🫶

Hace mucho que tuve la idea de empezar este espacio, pero entre nos, me daba un poco de miedo sacar el tema. Si bien nunca le tuve miedo a ser polarizante (es la historia de mi vida), sé que es un tema sensible, y altamente cuestionado por los machirulos de turno y también por ciertos sectores del feminismo.

¿Te puede gustar la plata y ser feminista?

¿Se puede participar en el mercado y ser feminista?

¿Son mundos que podemos juntar?

A ver. Para mi, invertir es un poco como ir a votar. Vos tenés el poder de decidir cómo se mueve la plata y en donde no.

Si dejamos esta oportunidad servida en bandeja a los mismos de siempre, el resultado va a ser el mismo de siempre. Y muy en el fondo, el mensaje que les damos es que preferimos que lo sigan haciendo ellos. Que nos manejen las cuentas, las acciones, el mercado, las leyes, que nos elijan los presidentes. Todo. Que sigan moviendo los hilos —y los hijos, de paso— del mundo.

Durante más un siglo nos hicieron creer que no éramos buenas en esto. Negando esta conversación, les damos la razón. Esto no se trata de negar el pasado y el presente de muchas mujeres, sino de reclamar el lugar que nos pertenece.

¿Se resolverían todos nuestros problemas si tuviésemos plata y si todas invirtiésemos? No lo sé. Pero creo que el mundo se vería bastante distinto si gente coherente, con más sentido de lo colectivo y con la cabeza bien amueblada moviese más dinero. Estoy preparando justamente un newsletter sobre esto: cómo se beneficiaría el mundo de una participación más alta de mujeres en el mundo de las inversiones. Mujeres que a su vez le pueden dar oportunidades a otras mujeres, mover la rueda de otra manera, y sacarnos de esta p*** pobreza, que cada día tiene más cara de mujer.

Creo que esta conversación es un poco la llave de todo.

No vimos una versión del mundo en donde las mujeres deciden dónde va el dinero.

Me interesa ver eso. Me interesa esa conversación. Por eso creé este espacio.

Y por eso, me banco la pelusa. ;)

Ahora sí, newsletter #2.

Cuando era chica me encantaba mirar Utilísima. ¿Recuerdan ese programa? Era como la biblia del quehacer doméstico. Lo veía con mi madre todos los días a la tarde, religiosamente, y tomábamos notas diligentemente de todos los tips en un cuaderno.

Ahora que lo pienso, qué nombre nefasto, ¿no? Si te quedabas en casa, no sólo tenías que ser útil: tenías que ser U-TI-LÍ-SI-MA. Cada segundo en el hogar debía exprimir y utilizar al máximo. No vaya a ser que te duermas y te reemplacen, eh. Ojo.

(Me están haciendo señas detrás de cámara para que no me vaya por las ramas y vaya directo al punto. ¡Voy!)

Bueno, lo que más me llamaba la atención era que toda la información era dada en forma de ‘tips’. O sea, mini pastillitas de información, dosificadas de manera que sea un mini-mini-mini consejo. Muy superficial, sin entrar en mucho detalle.

Hacemos fast-forward a un par de años atrás, me invitan a dar una charla de estas de mujeres en publicidad, y expongo el tema de la masculinidad tóxica que estaba ligado a una campaña que estaba haciendo, con bastante marco teórico sobre el tema. Al finalizar, la organizadora me dice que el tema le pareció “muy elaborado para el público" y que la próxima “mejor me tire unos tips”. Público en el que eran todas mujeres, claro está. De más está decir que me saqué. Mi reacción igual fue completamente desproporcionada y un tanto maleducada, pero este comentario me triggereó: me retrotrajo al nefasto mundo de los tips de Utilísima.

¿Por qué se le aplica la lógica de receta de cocina o truquito de belleza a toda la info que nos llega?
¿Por qué toda la información se nos da ultra masticada, subestimando nuestra inteligencia?
Como si fuésemos un poco tontas que no sabemos comprender algo complejo, o abordar un tema en profundidad.

¿Hay un sesgo en sí de cómo nos llega la información?

La respuesta es sí. La brecha informativa es una realidad.

—¿Cuántas brechas vamos ya? Perdí la cuenta—

Todo lo que nos llega es superficial y sesgado. Lo cual está todo bien si estamos hablando de un bizcochuelo, pero esto de sobresimplificar aspectos de las finanzas sobre los cuales tuvimos cero exposición, que nos exceden, obviamente nos generan el efecto contrario: no entendemos nada.

Y estos no son los únicos problemas que tenemos con la poca información que nos llega, en forma de bolu-tip™. También está en el contenido en sí que, cuando no, es mega sexista.

Todo lo que nos llega es sobre ahorrar

2x1 EN YOGURES LOS MARTES CON TARJETA CADORNA.

—Pero nunca nos llega el ‘tip’ de cómo invertir en esa empresa de lácteos. Jamás—

A las mujeres nos bombardean con consejos sobre cómo economizar y ser las reinas del hogar en lo micro, pero nunca sobre cómo desenvolvernos en lo macro.

También habrán escuchado mil veces el bolu-tip™ financiero de “si ahorrás los $4 del capuccino, en un año tendrías X”. Déjenme explicarles por qué esto es mega sexista. Primero, porque los consejos que nos llegan son todos sobre privaciones. Segundo porque a un hombre le estarían tirando data sobre si todavía tiene sentido invertir en inteligencia artificial o si ya es tarde, no en ahorrarse el costo de un capuccino.

Si hay algo que sabemos las mujeres, es ahorrar. Según MAPFRE, las mujeres ahorramos un 15% más, a pesar de que nuestros ingresos son un 22% menores.

Obvio que nos va bien ahorrando: es literal toda la info que nos llega.

Lo peor es que tenemos fama de “gastadoras”. Lo he bautizado como “el gaslight del siglo”. Pero eso es para otro newsletter.

Se nos habla de lo que “nos perdimos”

“Si hubieses puesto 100 dólares en Microsoft en 1986 , hoy tendrías…”

Ok, perdoname por haber estado empezando primer grado y no entrando a Interactive Brokers a invertir 100 dólares en Microsoft. Te pido mil disculpas. Perdoname por no haber estado invitada a esta fiesta de las inversiones, literal no me dejaban ni abrir una cuenta.

Ahora, fuera de broma, esto de que el mejor momento para invertir ya pasó, te lo perdiste, es un tanto tóxico y crea una sensación de derrotismo inmediato. Para qué voy a participar, si lo mejor ya pasó y ya me lo perdí.

Y también lo que hace este tipo de información es seguir alimentando la teoría de que invertir es medio una timba donde la “tenés que pegar”, cuando en realidad no es así.
Invertir es un hábito, no una timba.

La mayoría de los periodistas de finanzas son hombres

El 80% de los artículos que encontramos son escritos por hombres. Qué sorpresa, ¿no?

Toda la información que nos llega sigue ciertos parámetros que tienen más que ver con el tipo de inversión que hace un hombre: más corta y especuladora. Más tipo casino.

Nosotras, por otro lado, invertimos de manera diferente: preferimos estrategias a largo plazo, con menos movimientos. Es verdad que no encontrás tanta información sobre este tipo de approach, es todo meté el dinero ya acá, si el S&P 500 va a crashear o no, cosas que son no sólo confusas sino poco relevantes para alguien que está invirtiendo más a largo plazo.

Los padres no tienden a hablar de dinero con sus hijas

Desde el principio, nuestro primer contacto con el tema está distorsionado: la información no nos llega directamente o ya viene sesgada y cargada de sexismo.

Según Fast Company, los padres abordan el dinero de manera diferente con sus hijos e hijas: a las niñas se les enseña a ahorrar, mientras que a los niños se les enseña a invertir.

Desde pequeñas, enfrentamos un sesgo fuerte que nos etiqueta como ‘gastadoras’ o, peor aún, nos crían para ser simplemente administradoras del hogar.

Y el colmo, también recibimos menos dinero como regalo de Navidad: unos $20 dólares menos. Hermoso todo.

Entonces, ¿dónde está la info? ¿Dónde me entero de dónde invertir?

El primer paso para entender cómo invertir es sorprendentemente simple y rara vez mencionado: seguir las noticias. Tomate tu tiempo para entender el mercado, el tuyo y el global, antes de adentrarte. Familiarizate con los hechos que pueden afectar tus inversiones. Antes de meterte en la cancha, hacé reconocimiento de campo.

—Perdón por la metáfora futbolística—

Olvidate de los consejos de los fin-fluencers por un segundo, están siguiendo estrategias que quizás no se alinean con la tuya.

Información financiera no es tratar de cazar el tip sobre cuál es el nuevo Amazon.
Es tratar de entender el panorama, y entender a qué querés jugar, en dónde te interesa que esté tu dinero, considerando tus valores y tus metas personales, las cuales son únicas para vos.

Aparte, te va a ayudar también con la sensación de ‘timba’ si entendés un poco más el terreno. Obvio pueden pasar cosas que están fuera de nuestro control. Pasan todo el tiempo. Pero después le agarrás la mano y es como seguir una serie con millones de plot-twists.

Tarea de esta semana

Empezá a seguir cuentas y podcasts que hablan sobre economía y finanzas que normalmente no seguirías, y que te den un pantallazo global de la situación:

Mis preferidos son:

The Intelligence podcast (en inglés)

FT, diario e IG (en inglés)

Moby (sólo las noticias)

Hoy en El País podcast (en español)

Si entran a la cuenta de IG y se fijan a quién sigo, hay varios más.

Tomate unos 15 minutos a diario para entender el panorama mundial. Que sea parte de tu scrolling y podcasts que escuchás a diario. Hacete un ritual. Cafecito y finanzas. Correr y finanzas. Cinco paradas de metro y finanzas. Vas a ver que en tres meses vas a ser una pro, vas a tener una opinión formada sobre el tema, y sentir que estás en control, porque estás informada.

Y haceme caso, por favor, pedite ese capuccino en paz. 🙏

¡Nos vemos la próxima semana! 👋

Glosario: S&P 500

El S&P 500 es un índice que mide el rendimiento de las 500 empresas más grandes que cotizan en la bolsa de Estados Unidos. Es como un termómetro que nos dice cómo le está yendo a una parte importante de la economía de ese país, por eso todos los días vemos en las noticias si bajó o subió cual telenovela, ya que refleja la salud económica de una de las grandes economías del mundo.

El nombre S&P 500 proviene de "Standard & Poor's," que es la empresa que creó este índice. "500" se refiere al número de empresas incluidas, de las industrias más diversas, desde Google hasta Walmart. Las empresas más grandes tienen más peso en % que las más pequeñas.

No podés invertir directamente en el S&P 500 ya que es un índice, pero si podés comprar un fondo que replique su rendimiento.

Otros índices interesantes:

Nasdaq: Índice que incluye muchas empresas tecnológicas y de alto crecimiento de Estados Unidos.

Dow Jones: Sigue a 30 grandes empresas estadounidenses muy influyentes.

FTSE 100: Representa a las 100 principales empresas que cotizan en la Bolsa de Londres.

MSCI World Index: Incluye empresas de 23 países desarrollados, ofreciendo una visión global del mercado.

MSCI Emerging Markets Index: Compuesto por empresas de mercados emergentes como China, India y Brasil.

Cargando...

Fofocas del mercado

Me pidieron noticias, tienen noticias. Acá tres para prestarle atención.

Me gusta la palabra fofoca, que significa chisme en portugués. Les dije, para mi es todo una gran telenovela.

Nvidia batió otro record, subiendo un 10% el jueves pasado.

Rishi Sunak llamó a elecciones adelantadas en Reino Unido, y los mercados reaccionan.

Luz verde para que Ethereum tenga su ETF.